La psicología Transpersonal, surgió a finales de los años 60 para abordar aspectos que en general, la psicología en la época, había marginado, debido a una serie de creencias erróneas, que no permitían la comprensión de la naturaleza humana:
1º creencia: el desarrollo psicológico, se frena o detiene en la madurez, esta creencia ya está desmentida por la propia psicología evolutiva oficial.
2º creencia: la salud psicológica se puede deducir del estudio de la patología, hasta esa época, sólo se estudiaba la patología en el ser humano, no se contemplaban los estados de bienestar profundo, etc.
3º creencia: todos los estados no ordinarios de conciencia y las experiencias místicas o transpersonales, son o bien insignificantes o bien patológicas.
En 1969, Maslow propuso el término transpersonal para designar esta nueva psicología, que sería, para Maslow, la “Cuarta Fuerza”. La primera era el conductismo, la segunda el psicoanálisis y la tercera la psicología humanista.
Acompañando a estas creencias falsas, la psicología tradicional, ha ido evolucionando, basándose en métodos aceptados científicamente.
La conciencia no era tenida en cuenta porque la física de la época se basaba en una concepción mecanicista del mundo, donde sólo era real lo que podía verse y tocarse …con los avances de la física cuántica, el modelo holográfico del universo (David Bohm), las aportaciones del neurobiólogo Kart Pribram, para explicar el funcionamiento holográfico del cerebro, y otras aportaciones no menos importantes, se puede comprender mejor el tema de la conciencia y los estados ampliados, experiencias transpersonales..
Podemos definir entonces a la Psicología transpersonal como el estudio psicológico del desarrollo humano más allá del ego (Vaughan en Grof), también de las “vivencias transpersonales, que implican una expansión de la consciencia más allá de las fronteras habituales del ego, del tiempo y del espacio" (Grof en Rowan) durante las cuales "se puede vivenciar como ilusoria nuestra identidad separada y aislada mientras que se vivencia como real la unidad subyacente de toda la existencia" (Vaughan en Walsh y Vaughan, 1994).
La expresión "expansión de la conciencia" normalmente implica un segundo significado adicional que se refiere a una paralela "expansión de la identidad", y en este sentido se trasciende no solamente al ego sino también nuestra identificación con él.
Además se ha encontrado que las vivencias transpersonales ejercen una influencia positiva sobre las personas que se plasma tanto en cambios perdurables a nivel fisiológico como a nivel psicológico y conductual (Grof, 1993, 1994, y Walsh y Vaughan, 1994).
Uno de los fines principales de la psicología transpersonal es la delimitación de las fronteras y las variedades de la experiencia humana consciente (Rowan, 1996) y también que apunta hacia una integración general de las vivencias trascendentales en nuestra comprensión de los procesos psíquicos.
En la Psicología Transpersonal, se introducen y asimilan las enseñanzas de los sistemas psicológicos más antiguos y más ampliamente desarrollados, la unión de la visión de las tradiciones orientales, con los conocimientos occidentales.
La psicología Transpersonal, entonces se nutre tanto de la ciencia occidental, fundamentalmente de aportes de la física cuántica, de la astrofísica Antrópica y la relatividad einsteniana, como de la sabiduría oriental. De esa manera, integra los conocimientos que aportan ambas tradiciones para conocer las potencialidades del hombre, siendo su objetivo terapéutico básico no los conflictos particulares (aunque los reconoce, los trabaja y los integra), sino las soluciones generales, y su modelo de referencia no son las personas afectadas por síntomas neuróticos, ni las llamadas "normales", sino los Héroes, los Budas, los Cristos, los Gandhis, etc.
El término transpersonal, hace referencia a lo “espiritual”, entendiendo por espiritual algo que no tiene que ver con las creencias religiosas, credos, o el seguimiento a supuestas personas “iluminadas”, sino que, tiene que ver con el grado de amor y expansión de conciencia hacia la unidad, que un ser humano ha alcanzado a lo largo de su vida.
De esta manera, la terapia transpersonal, nos pone en contacto con nuestra identidad esencial.
“Transpersonal” significa “más allá de la persona”. Se considera a la terapia como un “viaje acompañado” hacia el ser profundo que somos, con todas sus consecuencias sanadoras.
"Lo espiritual trasciende las creencias o credos ideológicos de carácter mental, y se manifiesta mediante una interna experiencia de totalidad y unidad.
El verdadero sanador en la Terapia Transpersonal, es la consciencia, porque el solo hecho de ser conscientes plenamente de algo, supone transformarlo automáticamente, sin esfuerzos particulares añadidos.
Desde esta perspectiva, la consulta de un Terapeuta Transpersonal, puede considerarse como un observatorio de la propia e íntima mismidad.
Aquella persona que llega a ser capaz de darse plena cuenta de sus conductas no deseadas, adquiere de inmediato opciones de acción que disminuyen su reactividad y la convierten en una entidad más íntegra y creativa." J. M. Doria.
Un misterioso impulso evolutivo empuja al ser humano al continuo aprendizaje y expansión.
Por el principio de neuroplasticidad cerebral, podemos crecer en sabiduría hasta el momento de la muerte.
El camino fluye de la preconsciencia a la consciencia, y de la consciencia a la supraconsciencia.
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