SENDERO TRANSPERSONAL

INTEGRANDO PSICOLOGIAS DE ORIENTE Y OCCIDENTE

Bienvenidos al blog!

La Psicología Transpersonal o Integral, es un enfoque terapéutico que apunta a que el ser humano alcance niveles óptimos de salud psicológica, dándole importancia a la expansión de la conciencia.

Se trata de un acompañamiento terapéutico para que la persona aprenda a observar sus patrones mentales, sus creencias, que son la causa del malestar, que aprenda a desidentificarse de sus contenidos mentales, a trabajar con sus emociones saludablemente, que aprenda a hacerse responsable de sí misma, de sus relaciones, de sus experiencias, sin culpabilizar al entorno, a la vida por lo que le sucede, comprendiendo que la adversidad, es una oportunidad de cambio y desarrollo personal.

Capacita al paciente para que aprenda a satisfacer de una manera saludable sus necesidades a todos los niveles: físico, emocional, mental, espiritual, aprendiendo a conectar con la dimensión trascendental; todo ello conlleva a una integración de su personalidad y a alcanzar niveles superiores de salud psicológica, para luego poder trascenderla y conectar con la esencia.

Se toman en cuenta los problemas, dolencias particulares que empujan a la persona a una consulta y se las trabaja e integra, pero el enfoque principal de la Terapia Transpersonal, que la hace diferente y más abarcativa que otras terapias psicológicas (integra psicologías de oriente y occidente) es el de capacitar a la persona para que aprenda a conectar con sus propios recursos internos y permita desplegarse sin temores al proceso de crecimiento natural.

La terapia utiliza diferentes técnicas que se adaptan a las necesidades del paciente y a su estado de consciencia, integrando los niveles físico, mental y emocional (ego) y luego trascendiéndolo hacia los valores superiores, como la compasión, el amor a los demás seres vivos, el sentido de la propia vida, el desarrollo de la creatividad, etc., favoreciendo cambios en su nivel evolutivo.

lunes, 7 de abril de 2025

Mundo interior


Las semillas germinan en las tinieblas, recubiertas de una doble capa de oscura tierra y de blanca nieve; los manantiales de agua brotan con más fuerza y más pureza cuanto más oculta en las vísceras de la tierra se encuentra la vena que los alimenta.
Igualmente en el hombre, la íntima labor por medio de la cual él se hace a sí mismo y desarrolla sus propias facultades, la fatigosa elaboración y asimilación de los materiales de experiencia recogidos en la vida externa, el duro trabajo que precede a toda fecunda cosecha, cualquier acto, en suma, verdaderamente productivo y creativo se desarrolla en el recogimiento, en el silencio y en las regiones internas del alma.

El hombre moderno, cuya atención está siempre pendiente del exterior, continuamente distraído por la fantasmagoría de las apariencias, no puede sospechar siquiera la realidad, la concreción, la riqueza de ese mundo interior, el poder de las fuerzas que se agitan en él o la importancia de los acontecimientos que allí se desarrollan.

Lejos de ser el mundo de la inercia y de los sueños, el mundo interno es el mundo de las causas eficientes de las que toda manifestación visible y externa es sólo el resultado y el efecto.

Assagioli Roberto

sábado, 5 de abril de 2025

La oruga. (Cuento)


  Una pequeña oruga caminaba un día en dirección al sol. 
Muy cerca del camino se encontraba un saltamontes.

"¿Hacia donde te diriges?" – le preguntó -

Sin dejar de caminar, la oruga contestó:
"Tuve un sueño anoche: soñé que desde la punta de la gran montaña yo miraba todo el valle. Me gustó lo que vi en mi sueño y he decidido realizarlo".

Sorprendido, el saltamontes dijo mientras su amigo se alejaba:
"¡Debes estar loco!, ¿cómo podrás llegar hasta aquel lugar?, ¿tú?, ¿una simple oruga? …. una piedra será una montaña, un pequeño charco un mar y cualquier tronco una barrera infranqueable"…

Pero el gusanito ya estaba lejos y no lo escuchó, su diminuto cuerpo no dejó de moverse.
De pronto se oyó la voz de un escarabajo preguntando hacia dónde se dirigía con tanto empeño. La oruga contó una vez más su sueño y el escarabajo no pudo soportar la risa, soltó la carcajada y dijo:
"Ni yo, con patas tan grandes, intentaría realizar algo tan ambicioso", y se quedó en el suelo tumbado de la risa mientras la oruga continuó su camino, habiendo avanzado ya unos cuantos centímetros.

Del mismo modo la araña, el topo y la rana le aconsejaron a nuestro amigo desistir: "¡No lo lograrás jamás!" le dijeron, pero en su interior había un impulso que lo obligaba a seguir. 

Ya agotado, sin fuerzas y a punto de morir, decidió parar a descansar y construir con su último esfuerzo un lugar donde pernoctar.
"Estaré mejor", fue lo último que dijo y murió.

Todos los animales del valle fueron a mirar sus restos, ahí estaba el animal más loco del campo, había construido como su tumba un monumento a la insensatez, ahí estaba un duro refugio, digno de uno que murió por querer realizar un sueño irrealizable.

Esa mañana en la que el sol brillaba de una manera especial, todos los animales se congregaron en torno a aquello que se había convertido en una advertencia para los atrevidos. 
De pronto quedaron atónitos, aquella concha dura comenzó a quebrarse y con asombro vieron unos ojos y unas antenas que no podían ser las de la oruga que creían muerta, poco a poco, como para darles tiempo de reponerse del impacto, fueron saliendo las hermosas alas de mariposa de aquel impresionante ser que tenían en frente, el que realizaría su sueño, el sueño por el que había vivido, por el que había muerto y por el que había vuelto a vivir. Todos se habían equivocado……

¿Qué lección te deja?




miércoles, 2 de abril de 2025

Cuento de reflexión: los mineros (J. Bucay)


Esta es una historia verídica, que sucedió en África. 

Seis mineros trabajaban en un túnel muy profundo. De repente un derrumbe los dejó aislados del afuera sellando la salida.
En silencio cada uno miró a los demás. Con su experiencia, se dieron cuenta de que el problema sería el oxígeno. 
Si hacían todo bien les quedaba unas tres horas de aire, cuanto mucho tres horas y media.

Mucha gente de afuera sabían que estaban allí atrapados, pero un derrumbe como ese,  significaba horadar otra vez la mina, ¿podrían hacerlo antes de que se termine el aire?

Los mineros decidieron que debían ahorrar todo el oxígeno que pudieran. Acordaron hacer el menor esfuerzo físico, apagaron las lámparas que llevaban y se tendieron en silencio en el piso....era difícil calcular el tiempo que pasaba... incidentalmente uno tenía reloj.
Hacia él,  iban todas las preguntas ¿Cuánto tiempo pasó? ¿Cuánto falta? ¿Y ahora?

El tiempo se estiraba, cada minuto parecía una hora y la desesperación agravaba más la tensión. 
El jefe se dio cuenta que si seguían así, la ansiedad los haría respirar más rápidamente y esto los podía matar, ordenó al que tenía el reloj que sólo él controlara el paso del tiempo y avisara cada media hora.

Cumpliendo la orden, a la primera media hora dijo "ha pasado media hora". Hubo un murmullo entre ellos y una angustia que se sentía en el aire...

El hombre del reloj, se dio cuenta de que a medida que pasaba el tiempo, iba a ser cada vez más terrible comunicarles que el minuto final se acercaba.
Sin consultar a nadie, decidió que ellos no merecían morir sufriendo. Así que la próxima vez que les informó la media hora, habían pasado 45 minutos. 
No había manera de notar la diferencia. 
Apoyado en el éxito del engaño,  la tercera información, la dio casi una hora después... así siguió el del reloj, cada hora completa les informaba que había pasado media hora....

La cuadrilla apuraba la tarea de rescate, sabían en qué cámara estaban atrapados y que sería difícil poder llegar antes de cuatro horas. 

Llegaron a las cuatro horas y media. Lo más probable era encontrar a los seis mineros muertos.
Encontraron vivos a cinco de ellos. Solamente uno había muerto de asfixia: el que tenía el reloj…

Esta es la fuerza que tienen las creencias en nuestras vidas. Esto es lo que nuestros condicionamientos pueden llegar a hacer de nosotros.

Cada vez que construyamos una certeza de que un hecho irremediablemente siniestro va a pasar, no sabiendo cómo (o sabiéndolo) nos ocuparemos de producir, de buscar, de disparar (o como mínimo de no impedir) que algo de lo terrible y previsto nos pase realmente.
De paso y como en el cuento, el mecanismo funciona también al revés: Cuando creemos y confiamos en que se puede seguir adelante, nuestras posibilidades de avanzar se multiplican.

Claro que si la cuadrilla hubiera tardado doce horas, no habría habido pensamiento que salvara a los mineros.

NO digo que la actitud positiva por sí misma, sea capaz de conjurar la fatalidad o de evitar tragedias. Digo que las creencias autodestructivas, indudablemente condicionan la manera en la cual enfrento las dificultades.

El cuento de los mineros debería obligarnos a pensar en estos condicionamientos.
J. Bucay


martes, 1 de abril de 2025

CARTAS ASOCIATIVAS- METAFÓRICAS OH

 

Las Cartas OH, son cartas asociativas o cartas proyectivas, también conocidas como cartas Kesem.

No son juegos, no tienen nada que ver con el Tarot, ni con Oráculos.

Esta herramienta valiosa, se utiliza en Psicología, Psiquiatría, Psicoterapia y en Naturopatía, para el desarrollo personal y profesional, también se utilizan para la búsqueda del origen del conflicto que puede estar afectando a nivel de salud física, emocional o mental.

Su principal ventaja, reside en que es la propia persona la que se “auto-cura”, puesto que es ella misma quien las interpreta. 
Es decir, de una forma totalmente inocua y natural, la persona obtiene información a nivel de su subconsciente que de otro modo, sería extremadamente complicada de conseguir y a partir de ese conocimiento comienzan a surgir las soluciones a sus conflictos internos; en la mayoría de las ocasiones de forma instantánea.

Nuestro subconsciente, se expresa y entiende por medio de imágenes, símbolos, sensaciones, sentires. Todas las experiencias de nuestra vida, están guardadas en forma de imágenes y nuestro subconsciente piensa y trabaja con ellas; por medio de las cartas OH, nos comunicamos en su mismo idioma, un idioma que a él, le es familiar.


Beneficios

• Estimula la utilización de funciones del hemisferio derecho, el pensamiento lateral, la intuición, y la espontaneidad.

• Descubrir el cómo y el para qué de nuestras actitudes ante la vida y ante una situación puntual, en especial el para qué de las emociones: rabia, tristeza, depresión, ira,….esa toma de conciencia, hace más fácil el cambio de actitud.

• Desarrollo personal.

• Desarrollo de la creatividad, creación de nuevas perspectivas.

• Aumento la capacidad de comunicación y expresión.

• Mejora de la memoria.

• Resolución de problemas, búsqueda de soluciones creativas a problemas complejos.

• Entender la situación de las empresas, negociar en la empresa.

• Creación de metas. Ayuda a desarrollar nuevas perspectivas y ampliar los puntos de vista.

• Estimulación de la imaginación.

• Búsqueda de propósito en la vida.

• Trabajo con enfermedades psicosomáticas.

• Resolución de problemas de relación.

• Reformulación de las situaciones problemáticas.

• Incremento de la imaginación, práctica de la narración de cuentos.

• Desarrollo de habilidades comunicativas, etc.


Hay que tener en cuenta, como modo de clarificar, que las cartas OH, no tienen nada que ver con la adivinación, ni con el mundo esotérico.

El interactuar con ellas en una sesión, nos muestra conflictos, bloqueos, que a veces pensamos que no los tenemos, o que los hemos superado, incluso conflictos que ni sospechábamos que teníamos.

En ocasiones, el conflicto se resuelve en la sesión, por esa toma de consciencia que sucede al verlo reflejado en las imágenes simbólicas de las cartas.

Ante una situación de conflicto, donde no vemos salida aparente, nos pueden ser muy útiles para aclarar de dónde viene el problema, el origen, ayudándonos así a encontrar la solución más adecuada.


CONSULTAS PRESENCIALES – CONSULTAS ON LINE

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viernes, 28 de marzo de 2025

¿Vacío interior?- Habita el presente


Cuando la vida se vuelve ausente —cuando el presente no se vive con profundidad, cuando los sentidos se embotan y la atención se dispersa— surge un vacío interior que exige ser colmado. Y en ese espacio deshabitado, crece la búsqueda ansiosa. No como una exploración serena, sino como una persecución angustiada de algo que otorgue sentido, pertenencia o identidad.

La ausencia de vida presente no es una condición física, sino existencial. Uno puede tener salud, actividad, vínculos, y aun así sentirse deshabitado. Esta “ausencia” es una desconexión del momento, del cuerpo, de la experiencia directa. En lugar de vivir, se sobrevuelve la vida, atrapado en pensamientos, comparaciones, miedos o nostalgias. Se habla de lo que se hará, de lo que se fue, pero rara vez de lo que es.

Desde esa carencia, la búsqueda se vuelve ansiosa: se persigue una pareja, un trabajo, una causa, un maestro, una respuesta… no desde la claridad, sino desde la incompletud. Como si el sentido estuviera afuera, esperándonos en algún rincón del tiempo o del mundo. Pero lo trágico es que todo aquello que se alcanza desde la ansiedad nunca llena, solo distrae. Y la ausencia vuelve, renovada.

Esta inquietud constante es una forma de sufrimiento autogenerado. Se basa en la premisa, profundamente arraigada, de que lo que soy no es suficiente. Es una negación del valor inherente al ser mismo. En lugar de comprender la raíz de esta insatisfacción, se busca anestesiarla con logros, acumulaciones o experiencias intensas. Pero ninguna acumulación externa puede sustituir una presencia interna.

Ejemplos contemporáneos abundan: redes sociales llenas de vidas proyectadas pero vacías de vivencia real; consumos culturales voraces que no dejan espacio al silencio; incluso las prácticas espirituales, cuando se convierten en metas que hay que alcanzar, pierden su esencia y alimentan esta ansiedad de búsqueda.


Tres ejercicios para reflexionar:

1- Nombrar el vacío:

Tómate un momento de quietud y pregúntate con honestidad: “¿Qué estoy evitando sentir ahora?” No se trata de resolverlo, sino de nombrarlo. Ponerle nombre ya es un primer acto de presencia.


2- Suspender la búsqueda:

Durante un día, decide no buscar. No buscar distracción, aprobación, sentido. Solo observa lo que emerge cuando se deja de perseguir. A menudo, en esa quietud, aparecen comprensiones profundas.


3- Reencuentro con lo simple:

Escoge una actividad que solías disfrutar de niño: caminar descalzo, mirar las nubes, tocar agua. Hazlo no para obtener algo, sino para estar con eso, sin objetivo. El juego es el lenguaje natural de la presencia.

La vida ausente genera búsqueda ansiosa porque el ser humano no tolera el sinsentido. Pero cuando se habita el instante, cuando se acoge la realidad tal como es, sin necesidad de modificarla, la búsqueda se transforma. Ya no es ansiosa, es un descubrimiento. Y en ese descubrir, uno deja de estar ausente. La vida, entonces, ya no se persigue: se revela.

Esteban Rojas Nieto



jueves, 20 de marzo de 2025

Atención Plena- “Si estás bien contigo mismo, todo está bien”

 

Te invito a simplificar tu vida:

Contempla cada momento como un nuevo comienzo, como una nueva oportunidad para volver a empezar, para sintonizar, para volver a conectarte con la vida. 
Date el permiso de vivir cada momento de manera plena y total.

Existe una manera de vivir la “adversidad” que hace la vida más rica, más agradable y tú puedes tomar las riendas de tu vida y esa manera es el camino de la Atención Plena.

La práctica del “no hacer”, sintonizar con la intensidad de cada instante es intentar estar despierto y darse cuenta del momento y luego del siguiente: practicar el “Ser”.

Relájate en el presente sin intentar llenarlo de algo, permite a tu mente y a tu cuerpo descansar en este momento, en este instante, sin apegarte a los contenidos que hay en tu mente o a cómo se siente tu cuerpo, sólo observando, permitiendo, respirando y soltando...

Sintonizar con las experiencias básicas del vivir, aceptando las cosas, las situaciones tal y como están, ya que desde esa aceptación, podrás luego hacer los cambios oportunos, si procede.

Adquiere un compromiso contigo mismo para “solo ser”, permitir que todo “el hacer” automático y compulsivo de la mente, se detenga.

Conecta con ese espacio profundo de tu Realidad Esencial, “detrás” de los pensamientos, detrás del ruido mental, con ese estado de puro gozo, inafectado, con ese potencial que eres, desde donde todo está surgiendo…

Aprender a pasar del “modo hacer” del ego/personalidad, al modo “ser”, es aprender a buscar tiempo para uno mismo y a ralentizar, a alimentar la calma y la aceptación de uno mismo, observar a qué está dispuesta la mente en cada momento, aprender a observar nuestras ideas, y a darle rienda suelta sin que nos capturen, o arrastren. 

La observación es sin juicio, sin razonamiento, sin intentar aferrarse a los pensamientos que te resulten agradables, ni enfadarte con aquellos pensamientos que no te agraden, es decir sin rechazar, soltando, dejando pasar como “sin interés”, aprender a hacer sitio a nuevas formas de contemplar mejor los problemas y percibir la vinculación de unas cosas con otras, esta clase de aprendizaje hace que nos asentemos en el ser.

Cuando se amplia la conciencia, y aprendes a observar la mente concreta y a darte cuenta que eres más que todos esos mecanismos, condicionamientos que te hacen funcionar, que eres más que esos programas mentales, entonces puedes aprender a responder de nuevas maneras más acordes a los valores Esenciales, del Ser, y todas tus decisiones se ven afectadas por ello.
La Atención Plena no es  la “respuesta”, la solución a todos nuestros problemas de la vida, sino más bien que, todos los problemas de la vida, pueden verse con más nitidez a través de una mente clara y serena.

Juani




lunes, 10 de febrero de 2025

Recuerda


Recuerda que estamos de paso.
Recuerda que no sólo eres un cuerpo, una mente…
Recuerda ir despacio.
Recuerda conectar con lo sagrado.
Recuerda caminar descalzo.
Recuerda contemplar el cielo inmenso con sus nubes, las estrellas, la luna...
Recuerda arroparte en el calor de sol.
Recuerda aspirar el aroma de las flores.
Recuerda acariciar, abrazar, mirar a través de los ojos la esencia de la otra persona, y de tus mascotas.
Recuerda dar lo mejor de ti, desde el Amor esencial.
Recuerda ir soltando los apegos, aligerando el equipaje en tu viaje.
Recuerda cambiar la dirección de tu vida, si fuera necesario.
Recuerda que todo pasa, nada permanece.
Recuerda aceptar lo que no es como quieres.
Recuerda mantener una actitud de servicio.
Recuerda que en esencia todos somos uno, todos somos lo mismo a ese nivel, más allá de la personalidad.
Recuerda que en la personalidad se requiere delimitar, poner límites internos y externos sanos.
Recuerda cuidar tu energía vital.
Recuerda que estás aprendiendo a vivir.
Recuerda que no hay nada nuevo, solo hay que Recordar.
Recuerda que la vida es un juego, suelta el sufrimiento.
Recuerda que ya Eres.
Recuerda que has venido a desplegar y desarrollar el potencial que eres.
Recuerda que eres Luz, Conciencia, Paz, Amor.
Recuerda darte cuenta desde donde estas funcionando, desde la personalidad/ego condicionado (reacción/automatismo, patrones aprendidos, muchos en la infancia) o conectado a los valores del Ser esencial (elegir respuesta apropiada a la situación, asertividad…)
Recuerda aprender a dar, como también a recibir.
Recuerda aprender a ceder, como también a sostener.
Recuerda entrenarte en el “camino del medio”, en la justa medida; demasiado calor, quema; demasiado frio, congela: la justa medida.
Recuerda entrenarte en la sabiduría, comprensión de lo que toca por aprendizaje evolutivo.
Recuerda que, a un nivel más profundo, nadie “te hace nada”, cada quien actúa como puede, como sabe en este momento, de acuerdo a sus creencias, de acuerdo a sus programas aprendidos, de acuerdo a sus heridas y condicionamientos, al igual que tú; nada es personal en el juego de la vida; así que, despierta, observa, aprende de las dificultades, integra y suelta. Lección aprendida, ya no se repite, aligera el camino…
Recuerda que es necesario aprender a perdonar y perdonarte hasta que comprendas que no hay nada que perdonar, libérate.
Recuerda compartir con personas que quieran “bonito”, que aporten a tu vida y que tú les aportes a ellas, y de las que “no aporten”, aprende lo que la vida tiene para enseñarte y si es necesario, pon distancia, mas hazlo desde el amor y la comprensión, no desde el rencor y el resentimiento.
Recuerda hacer tu parte, la que te corresponde, sin interferir en la evolución de los demás (sin invadir, sin rescatar, sin agredir, sin imponer, sin prohibir, sin manipular, aunque sea de manera sutil)
Recuerda resignificar tu pasado y soltarlo con las lecciones aprendidas.
Recuerda no aferrarte a expectativas, ni a un futuro imaginario, vive el aquí y ahora con lo que hay y desde el cambio aquí y ahora, es que se gesta tu futuro.
Recuerda agradecer todo lo que está en tu vida en este momento y valorarlo, pues eso te abre a la abundancia.
Recuerda que todo lo que te sucede es absolutamente necesario para tu evolución, aunque a tu mente no le agrade.
Recuerda que no puedes cambiar a nadie, solo puedes hacer en tu interior.
Recuerda que es mediante ensayo y error que aprendemos, así que de los errores saca el aprendizaje.
Recuerda abrazarte en tus momentos de mayor dificultad, amar a tu niño interior cuando más lo necesite.
Recuerda desidentificarte de los contenidos de tu mente, pues eres Conciencia que todo lo abarca.
Solo Recuerda y todo lo demás, se acomodará naturalmente en este curso de la escuela que es la Vida.


Juana María Martínez Camacho
www.centroelim.org